30.3.10

The Exploited - Punk's Not Dead (1981)

Karl Marx fue quizá el primer Punk.  Su sentencia “El Sistema Capitalista lleva en su interior el germen de su propia destrucción”, se hace tangible día a día, hora a hora. Después de todo, cualquier sistema se enfrenta a las propias resistencias que éste va creando. Nada es perfecto y el que aspira a la perfección está perdido en un hoyo oscuro y apestoso. La historia de la humanidad es una historia de resistencias y de contraataques.

En un sistema sociocultural las resistencias, por dinámica lógica, crean opuestos, nadadores a contracorriente: contraculturas. Desde luego, la paradoja alcanza el paroxismo cuando todas estas contraculturas, estos “salmones” sociales crecen, se agrupan, se hacen fuertes y son capaces incluso de hacer ver raros a los que van en el sentido de la corriente del río. Entonces se da la inversión y por un momento la contracultura se convierte en la cultura dominante! Epaah!

Dentro de toda esta vorágine sociocultural actual, se encuentra lo “punk”, término que como ya muchos sabrán, significa literalmente: inferior en calidad. Aunque el diccionario Webster’s Online anota otras acepciones curiosas, tales como: criminal joven, material para encender fuego, miembro de la subcultura juvenil punk (subcultura!) y la que más nos atañe en este texto: música rock con letras deliberadamente ofensivas que expresan ira y alienación social. Woow!

Los orígenes del punk como corriente social, como bien lo apunta la última acepción del diccionario citado, son musicales. Música surgida en el proletariado británico a finales de la década de los 60 y principios de la década de los 70. Son principalmente los hijos de los proletarios huelguistas y desempleados habitando los suburbios británicos, los que comienzan a expresar su frustración social a través de la música y de toda una actitud en contra del sistema.

El punk rock es, asimismo, una reacción antiperfeccionista contra los altos niveles musicales alcanzados por el rock y especialmente por el rock progresivo de aquel entonces. Con la misma actitud retro, que ha caracterizado a la cultura occidental y a la oriental occidentalizada a lo largo de los últimos 40 años, el punk rock retoma los ritmos del rock‘n’roll y los distorsiona, les quita esa pánfila alegría y la convierte en  ira y escupitajos. De igual forma, el bailecito rockanrollero se convierte entonces en un ritual de patadas, codazos y empujones. Así es bandita, hablo de uno de los más célebres rituales del caos llamado Slam que, como ustedes sabrán, significa: dar golpes… madrear, pues.

Sintetizándole mucho, son tres los grupos británicos que hay que mencionar para entender la infancia, la adolescencia y la adultez del punk: The Kinks quienes a mi gusto lo inventaron sin saberlo. The Sex Pistols quienes lo fundaron y lo comercializaron. The Exploited quienes lo legitimaron.

The Exploited es una banda escocesa surgida en Edimburgo en 1979 y liderada por el ex soldado Wattie Buchan, el único integrante que hasta la fecha continúa en la banda. A pesar de la inconsistencia en cuanto a los integrantes, The Exploited ha sido una banda congruente en lo que a actitud se refiere: siempre encabronados. Con este encabronamiento, los The Exploited produjeron en 1981 uno de los discos más memorables en la historia del punk en particular y del rock en general: Punk’s Not Dead.

Con esta poesía lumpen y que golpea duro y a la cabeza, The Exploited no habría podido surgir en otra época.  Los británicos, especialmente los de la mayoría obrera, lamentaban la victoria de Margaret Thatcher y el partido conservador. La Gran Bretaña estaba destinada a convertirse en la tierra más fértil para una generación de jóvenes anarquistas. Grupos como Discharge o G.B.H también servían como voceros de la clase proletaria para expresar el descontento generalizado. Esta misma generación de punks también quería ser vista como los “verdaderos” punks en oposición a la primera generación encabezada por The Sex Pistols quienes se habían rendido en la batalla contra el sistema y habían sido destrozados por sus propios vicios y la comercialización de sus trabajos. Así que esta nueva generación tomó la bandera con violencia. Hasta estos días la reputación de The Exploited está plagada de desmadres y putazos: incitación a la violencia en los conciertos, racismo, riñas con otras bandas en el backstage, destrucción e incendio de hoteles, entre otras.

La música que ha acompañado todos estos sentimientos de rabia y disgusto no es tan rápida ni tan brutal. El repertorio de The Exploited es crudo, pero normalmente consiste en canciones cortas en donde además de la batería más simple, se usan sólo dos o tres cuerdas de guitarras y bajos. El ejemplo más emblemático es el de la épica rola: Punk’s Not Dead que encabeza el álbum, donde sólo se utilizan dos cuerdas y un coro enérgicamente gritado y repetido a lo largo de los 2 minutos que dura la canción. El disco en general tiene una energía poderosísima y consta de otras rolitas tales como Cop Cars en la que el coro reitera imparablemente el odio hacia la policía, o Sex & Violence frase que se convertiría en uno de los paradigmas del movimiento punk. Y, desde luego, I Believe In Anarchy que se deja sentir como la hija rebelde y bastarda de la gloriosa  pero arcaica Anarchy In The UK de The Sex Pistols.

The Exploited también significó un aporte clave a la moda punk. Son los primeros que aparecieron con el famoso mohawk de colores a principios de la década de los 80. Los picos enormes que se alzaban de las cabezas rasuradas se convirtieron junto con la “A” anarquista en el símbolo punk por excelencia. Atrás pues, habían quedado The Sex Pistols que, a estas alturas, eran ya como los neandertales del punk. De hecho, The Exploited dedicó varias canciones al legendario grupo de Johnny Rotten y Sid Vicious (a quien, por cierto, se alude en la portada de Punk's Not Dead, a través de un niño que porta una playera que dice: Sid Vicious Dead). Sin embargo, los homenajes consisten en una suerte de parodia, que hicieron efectiva titulando varias canciones como las de los Pistols (God Save The Queen, Holiday In The Sun, Liar), pero en versiones totalmente distintas, mucho más rápidas y agresivas. De igual forma, la canción Never Sell Out, del álbum Fuck The System (2003) hace una referencia crítica a la forma en que el movimiento punk se había integrado al sistema, víctima de su excesiva comercialización. 

Para muchos el punk ha sido una forma de vida, más que una moda o un estilo. La influencia que éste ha tenido y sigue teniendo en la actualidad es incuestionable. El punk permea prácticamente todos los estilos musicales contemporáneos relacionados con el rock. La moda punk sigue siendo atractiva tanto para grupos sociales de diversa índole como para diseñadores de diversa mamonez.

The Exploited más que ninguna otra banda tipificó el punk de nuestros tiempos. En el presente, el álbum Punk’s Not Dead sigue siendo relevante, acaso tan relevante como el día que se publicó en 1981. El disco es definitorio en la historia del rock y del punk, les guste o no. Este álbum y The Exploited serán aún más importantes en 20 años que millones de bandas indie de la actualidad. Se los puedo asegurar. El Punk No Ha Muerto. Marx lo presagió y la Historia seguirá contándolo.


4 comentarios:

hecherrod dijo...

muy buena reseña con sus toques históricos..

Diábolo dijo...

Gracias, carnalito, sin historia no hay presente, qué no? Un abrazo, acá andamos.

Violeta Vázquez-Rojas dijo...

y porqué decían que The Exploited eran fachos y les boicoteaban los otros punketos sus conciertos? Era verdad? Pura ardidez? Cuéntanos esa parte de la historia, plis.

Diábolo dijo...

Verás, querida Viole(n)ta, cuentan por ahí que Buchan, el cantante, ha usado svásticas en algunas presentaciones. Además se dice también que durante algún tiempo era común que The Exploited incitara a sus seguidores a comportarse violentamente con las demás bandas presentes. En fin, hay un montón de historias terroríficas, seguro la mitad son ciertas y las otras más o menos. Lo que no está en duda es que estos cabrones tienden al mal evidente y no al transparente baudrillardiano. Saludos, querida!