19.4.10

Sodom - Agent Orange (1989)

Sodom forma parte de una trilogía musicalmente importante y devastadora. En la década de los ochenta, Alemania fue la cuna de tres bandas definitorias en la historia del Thrash Metal: Destruction, Kreator y Sodom.

Las virtudes de este tipo de música radican no únicamente, pero sí principalmente, en tres factores: la rítmica, la coordinación y la creatividad. El Thrash Metal requiere de un altísimo nivel de coordinación debido a que gran parte de su atractivo depende de la velocidad con la que se ejecutan las canciones. Y para que la velocidad no se ahogue en el mar de la monotonía, ésta debe contener los otros dos factores: rítmica, que es la habilidad para combinar notas y riffs de diferentes tiempos, es decir, el manejo de las diferentes figuras musicales: redondas, blancas, corcheas, semicorcheas, etc., y creatividad para armar buenas melodías en un campo aparentemente árido y restringido por la necesidad, inherente al género en cuestión, de la agresividad musical. Puuts!

Pues bien, el álbum Agent Orange que Sodom publicó en 1989, goza de las tres virtudes. Pero es, en particular, su rítmica la que sobresale de las demás. Gracias a esto, el álbum está lleno de contrastes, mismos que sirven como descanso auditivo en el maratón thrashmetalero de 40 minutos de duración. Con desplantes que van desde lo acústico (escúchese el intermezzo en Tired and Red) hasta lo deathmetalero (bombos y tarola artilleros por parte de Chris Witchhunter), pasando por episodios blackmetaleros (la voz de Tom Angelripper es oscura y demoniaca) y hasta rellanos simplemente punkrockeros (track 7: Ausgebombt), estos alemanes logran crear un mosaico que es igual sólido que heterogéneo. Ahora bien, lo anterior no implica que los de Sodom abandonen su campo de acción. Por el contrario, Agent Orange es uno de los álbumes más representativos y de mayor influencia en la escena thrashmetalera en sus casi tres décadas de existencia.

Líricamente los álbumes de Sodom han estado ligados a la guerra, especialmente a la de Vietnam. Por supuesto, Agent Orange no es la excepción. La impronta del título lo dice todo. El nombre alude al poderoso herbicida-defoliante utilizado por el ejército estadounidense para sobreponerse a la hostilidad de la vegetación surasiática. A la fecha, las secuelas del Agente Naranja siguen cobrando vidas. La crítica de Sodom hacia la actividad bélica ha sido una constante tanto en las letras como en las ilustraciones de sus 12 álbumes de estudio en donde varias veces se ven personajes portando armas de alto poder, máscaras y diversos tipos de parafernalia bélica.

21 años después del lanzamiento de Agent Orange, Sodom sigue produciendo música, y lo hace bien. Su más reciente producción The Final Sign of Evil (2007) sigue siendo variada y energética. Si bien la propuesta de Sodom nunca ha sido revolucionaria ni mucho menos, ésta ha servido como base para nuevas ideas mucho más arriesgadas pero, desafortunadamente,  no siempre tan buenas. Sodom es el Thrash Metal puro y duro. Y nos hace recordar que, como en el box, el putazo que noquea no sólo debe ser rápido, sino también preciso y en el momento indicado.



2 comentarios:

hecherrod dijo...

muy bueno, no tenía el gusto de conocer la semblanza de Sodom, un ligero acercamiento lo hace más atractivo aún.. chido.

Diábolo dijo...

Chido, compadrito! Seguiremos informando... Saludos!